Un
futuro incierto con un final cierto, mal que a muchos nos pese, que pasa por
sentarse y llegar a acuerdos.
José
Joaquín Solís.
Dije miles de veces que
Lopera no quiere volver al Betis ni vivo, imagínense de la otra forma. La
prueba, ahora que las medidas cautelares se han levantado, es que no volverá al
Consejo, al menos dando la cara, porque aparte de que sabe lo que le espera por
parte de un buen sector de la afición, no querrá enmarronarse más con cualquier
cosita que se le ocurra hacer. Ello no quita que haya decidido poner de
presidente a quien ha querido serlo siempre, sabiendo además, como letrado, que
la propia justicia podría quedar bajo sospecha si en apenas quince días tomara
otra nueva decisión como las medidas cautelares procedentes del Juzgado de Lo
Mercantil. La rapidez, pienso yo, no puede ser para unos, y otros, no.
La bomba de la noticia
acaecida el 11 de Julio ha hecho disparar todas las alarmas, malas y buenas,
depende de para quiénes. Resulta casi castigo divino que el levantamiento de
las cautelares haya venido cuando las cosas se estaban haciendo medianamente
bien, mientras que en años anteriores se haya acusado a los mandamales de
turno, de hacer bueno al de Jabugo con decisiones tomadas a palos de ciego. En
cierto modo, aunque no se sepa, todo tiene un por qué. Quizá, como el alumno
que estudia el último día y recibe suspenso cuando piensa que se empeñó e más no
poder. Y ahora, ¿qué?
Lopera sabe de sobra lo que
puede venirle encima; al menos, dos juicios, uno que puede quitarle lo que
según el juez podría no ser suyo, y otro, que directamente podría meterlo en la
cárcel. Diría Julio Iglesias “Y lo sabes”. El que pueda ahora estar con las
acciones nuevamente en el Betis las cosas las cambia lo justo: por un lado,
intentar que el Betis no se persone en las acusaciones, y por otro, recurrir la
posible culpabilidad de la gestión del concurso, una y mil veces, desde
dentro, de ahí que las Plataformas no hayan querido que las cautelares se
levantasen jamás. Para quienes conocemos el derecho aunque sea a lo lejos, eso
de que determinadas medidas se tomen más de cinco años es complicado. Por otro
lado, los hermanos Cuéllar, letrados, sabían que esto se acabaría alguna vez,
aunque, del mismo modo, estaban esperando a que el Mercantil se pronunciara.
Tantas veces que dijo Adolfo sobre la necesidad de “hablar”, no era sólo para
solucionar este problema sino porque eran conscientes que alguna vez la
tortilla daría la vuelta en contra de lo que han defendido estos años. Diría
Neo, “No ha respondido a mi pregunta, y ahora, ¿qué?”
La amenaza de lo que al
señor Ruiz puede caerle, así como el hecho de que quienes estaban dentro vean
destruir lo construido, no hace más que ver la necesidad de que las partes
“hablen”. Dirá alguno, “como si no lo hubieran hecho ya decenas de veces”. Sí,
pero de verdad. Si tal como
dice Mérida un administrador no vendría hasta Abril, da tiempo más que
de sobra a que se tomen un montón de decisiones que no atañan sólo al césped, y
para cuando el administrador venga, a lo mejor hasta la gente está contenta con
los que están porque, claro ha de quedar, la imagen se lava si la pelotita
entra: primas, fichajes de categoría, tentar para que algunos enemigos entren
en el Consejo…ya saben. Si
las nuevas medidas se aplicasen de inmediato, sería en cuanto al paquete
discutido, lo cual quitaría la mayoría absoluta, con un administrador judicial
nuevo, que le impediría mandar, pero ya está dentro, cosa que bajo ningún concepto
se quería.
Bitton en medio de todo
esto. Afirman mil veces que tomarán las riendas del Betis el 31 de Julio en un
comunicado al caso donde tienen preparados sus propios proyectos. ¿Qué pasará
con lo que ya hay? Constancia tengo de gente que ve peligrar su futuro, y
motivos tienen. Ni me atrevo a escribir esto en metáfora porque no me gusta
hablar del pan de los demás, pero, en cualquier caso, que cada uno vaya
ajustándose como mejor pueda. Quien más y menos sabe lo que le espera.
Para el amado amigo que me
dijo en la misma mesa donde comimos en un homenaje, que todo esto estaba por
acabar más pronto que tarde, decirle que igual tiene algo de razón, todo
depende de lo que él considere su tiempo. En lo que a mí respecta, queda menos
que ayer, pero quedar queda.
Ah, y no me olvido de un
cierto sector de la prensa que sabía que iba pasar algo de esto. Sí, lo sabía,
puesto que el énfasis en escribir lo bueno de las medidas cautelares en no
pocos artículos los delata. A ver qué pasa ahora con las primicias y con los
familiares que trabajan en el club.
FUENTE: www.betis.com.es
http://josejoaquinsolis.com/2015/07/en-lo-que-podria-acabar-todo-esto/
