No está el Betis para exquisiteces, ni exhibiciones y lo más importante de la matinal del Manzanares han sido esos tres valiosisimos puntos que deben servir para aumentar la confianza e ir poco a poco mejorando el juego. La primera mitad no fue buena por parte de los de Mel, pero lo más destacado fue llegar al descanso con el cero cero inicial. En la reanudación, Pozuelo aprovechando un fallo de la defensa local, aprovechó para adelantar a los verdiblancos y a partir de ahí cambiar la decoración, pasando el Betis por sus mejores momentos de juego, con un Casto inconmensurable bajo los palos y la puntilla con el 0-2 de Roque Santa Cruz. Se va el Betis al año nuevo con buenas perspectivas y a la espera de un nuevo choque clave ante Sporting de Gijón en Villamarin. Antes del descanso navideño, falta la cita copera ante el Córboba y habrá que remontar el 1-0 que traen a su favor los cordobeses del partido de ida.
